Gabriela Warkentin (El Universal)
“¡Ah, chingá! ¿Y ‘ora qué hacemos con tanto video que anda por’ai?”
No se trata de censurar internet, ni de aceptar que en las reformas electorales se les “olvidó el entorno digital”, ni de vociferar alarmados por la guerra sucia en las redes. De lo que se trata es de reconocer que seguimos teniendo tomadores de decisión profundamente analógicos, que quieren abordar el mundo digital con ideas, conceptos y esquemas rebasados, y que se pierden en las minucias de la técnica en vez de aprehender los horizontes de la tecnología. Así no sólo vamos a seguir haciendo el ridículo, sino que nos empeñaremos en profundizar la brecha entre quienes viven y hacen en el siglo XXI, y quienes perduran y deshacen en el siglo XX. No es un asunto de partidos, ni de clases sociales, ni de generaciones, ni de cartografías. Porque en todos hay de ambos. Es un asunto de perspectiva y de dinámicas sociales.